El TNT 2021 ha unido a tres viejos conocidos y expertos del mundo de la creación de contenidos multimedia en vivo. En .nomedia los Voluble —Pedro y Benito, andaluces con veinte años de remezcla a sus espaldas— se encuentran con Juanjo Fernández (aka Gnomalab), artista-araña de Terrassa con patas metidas en el mundo del software, el audiovisual, el live cinema y la docencia.
El espectáculo tiene formato de sesión de música electrónica. Luz, música, oscuridad. Tres pantallas y tres personas en escena con instrumentos para gobernarlas. Pero allí donde el DJ de turno busca embarcarnos en una experiencia total e inmersiva, en .nomedia los Voluble+Gnomalab ponen conocimientos y medios precisamente al servicio de la traición de este principio. Quieren subvertir el propósito comercial de la remezcla y volver al sentido original de la rave —un lugar donde el movimiento, la fiesta, eran también una forma de acción política—.
Para mantenerse en la reflexión y no en la evasión, durante el espectáculo los tres creadores se complicarán la vida. Editando por corte y no por fundido, o dejando mucho espacio a la improvisación y a la entrada de material recopilado en directo (vía redes sociales, por ejemplo) convertirán el glitch —la interrupción, el error, el agujero a lo Matrix— en una especie de ancla para la percepción.
La idea de fondo es que nos demos cuenta de cómo, en todos los ámbitos, la tecnología que tenemos a nuestro alcance aspira a una perfección que es tan cómoda como peligrosa. Solo hay que pensar en el mundo de los filtros de imagen. O en la realización televisiva, que nos muestra la explosión desde una distancia prudente, pero no la carnicería que deja una vez desaparece la polvareda. O en el creciente número de cámaras de seguridad que hay en la calle.
La tecnología nos hace más guapos, más eficientes y más libres. O no. También convierte calles y dispositivos móviles en prisiones vigiladas —y nuestros cuerpos, nuestro tiempo y nuestra atención en rehenes permanentes—.